Cierre de porches

Si tienes un porche en casa, sabes que es un espacio precioso para relajarte al aire libre, pero a menudo limitado en los meses de verano. ¿Qué ocurre durante el invierno o los días de lluvia? Cuando llegan el frío y la lluvia, este espacio queda a menudo desaprovechado, limitando las posibilidades de disfrutarlo durante todo el año. Esto hace que una parte valiosa de tu casa no sea tan útil como podría ser.

Con el cierre del porche, lo convertirás en un espacio que se utiliza en cualquier época del año. Ganarás un espacio extra que podrás adaptar según tus necesidades: una sala de estar adicional, una zona de trabajo o un comedor con vistas, sin preocuparte por el clima.

Las ventajas de un cierre de porche son muchas. Principalmente, ganas un espacio adicional en casa que puede convertirse en una sala de estar, un despacho o incluso un comedor. Las posibilidades son infinitas.

El cierre se hace colocando balconeras de aluminio o de PVC a lo largo de las aberturas del porche. Pueden ser correderas o practicables y están disponibles en muchos diseños y colores como blanco, gris antracita o imitación madera.

Con el cierre, el porche mantiene una temperatura estable durante todo el año gracias a sus prestaciones de aislamiento térmico y acústico. Esto no sólo aumenta el confort, sino que también contribuye a reducir el consumo energético, puesto que se necesita menos calefacción y aire acondicionado.

Los beneficios no terminan aquí: tanto el aluminio como el PVC son materiales resistentes que no se corroen con el tiempo, ofreciendo una larga durabilidad. Además, su mantenimiento es sencillo y sólo requiere una limpieza ocasional para mantener su aspecto original.